sábado, 26 de diciembre de 2015

The Bad and the Beautiful (1952)

5 Oscars: Mejor actriz secundaria (Gloria Grahame), Mejor guión, Mejor guión, Mejor fotografía, Mejor vestuario y Mejor dirección artística (Blanco y negro).

Vicent Minelli nos presenta un potente melodrama, único en su estilo, delicioso y con un ritmo perfecto en donde las emociones explosionarán como la cascada de un río y veremos que el malo no lo es tanto, después de todo.

Cada personaje es tan importante como el otro, es la pieza necesaria para lo impecable, para lo notable, para una obra maestra. El trío del director, de la actriz y del guionista es fundamental para la película, tanto como el productor. Cada personaje de la película cuenta su historia, cuenta como conoció a Jonathan Shields, cuenta como era lo miserable de su vida en ese momento y antes de eso y como cambió luego de ese acontecimiento. Lo que todos concuerdan, aunque lo odien, es que sus vidas cambiaron para bien de algún modo, alcanzaron el éxito y todo se lo debían de algún modo por él, aunque sus vidas hayan sido marcadas por el odio, el rencor y el desprecio.

Kirk Douglas, como siempre, derrocha maestría en su performance. En esta película protagoniza a Jonathan Shields, un inescrupuloso sujeto que es hijo de una gran estrella del cine. En el paso del tiempo conoce a aquel trío que lo llevará a la fama y a su desgracia. 

Primero conoce a Harry Pebbel (Walter Pidgeon), un mediocre asistente de director, que sueña con la fama y el reconocimiento. Trabajan duro y consiguen crecer en el rubro hasta que Harry es traicionado por Jonathan y su idea es robada y él pasa a un segundo plano, pasa de ser el director de la película a asistente de productor, orgulloso rechaza esto y da un paso al costado para bien, logrando dos premios Oscar. Luego conoce a Georgia Lorrison (Lana Turner), hija de una estrella de cine, mediocre, que odia a su padre, pero dentro de ella, lo idolatra, comparte sus vicios: es alcohólica, es una mujerzuela y es actriz, aunque en ese tiempo era una extra de extra. Jonathan la escoge en un casting y apuesta por ella, al poco tiempo está madura como actriz y logra ser famosa. Su peor error fue enamorarse de él y la traición es su único destino. Al igual que el director, da un paso al costado y desde ese momento se mantiene en la cima de la fama. Por último, conoce a James Lee (Dick Powell), un novato escritor de novelas que logró hacer un best seller en siete años, todo por su esposa, que después de todo era un estorbo para su concentración. Al conocerse, James no oculta su odio hacia él, pero después siente admiración por su compromiso y su modo de trabajar y porque después de todo, Jonathan era un genio. Jonathan planeó que un actor tenga un romance con la esposa de James para que este no sea interrumpido y logre acabar una obra maestra. Lo que no supo era que la muerte de la pareja infiel estaba escrita en el futuro. James al enterarse de todo, deja de trabajar con él y luego gana un premio literario por haber escrito sobre su esposa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario