Ninguna nominación al Oscar.
Esta película demuestra que para hacer películas de ciencia ficción no se necesita millones, ni la más alta tecnología, un guión excelente y original basta para llevarnos a una situación jamás pensada, solo posible en los sueños más remotos de un hombre. El gran acierto del polaco Juliusz Machulski es que combina la ciencia ficción con comedia y Serie B, de una manera sorprendete y brillante.
Esta película demuestra que para hacer películas de ciencia ficción no se necesita millones, ni la más alta tecnología, un guión excelente y original basta para llevarnos a una situación jamás pensada, solo posible en los sueños más remotos de un hombre. El gran acierto del polaco Juliusz Machulski es que combina la ciencia ficción con comedia y Serie B, de una manera sorprendete y brillante.
En la época de los 90 un científico descubre una técnica de hibernación que fue usado exitosamente en monos, ahora la gran prueba era hacerlo en humanos. Albert (Olgierd Łukaszewicz) y Maks (Jerzy Stuhr) son los valientes que se prestan para ese experimento, supuestamente iban a regresar a la normalidad dentro de tres años, pero al despertar descubren que todo ha cambiado: han pasado 53 años y no existe rastro del hombre, el planeta está dominado por las mujeres.
¿Quién no soñó nunca con ser el único hombre en el planeta y vivir rodeado de hermosas mujeres? Bueno, eso le pasó a los protagonistas y eso no fue para nada de ensueño, más bien fue traumático al principio. De todas maneras la naturaleza iba a ganar, si la mujer fue creada para vivir con el hombre, es imposible que estos escapen de la razón de ser de su existencia. Es cierto que los protagonistas no follaron a lo loco y no fue para nada una película porno cómo es posible ser imaginada al leer el título y sinopsis, pero al menos cada uno encuentra a su respectiva pareja y por ende, hacen que la reproducción sea natural y no por selección natural hechos por laboratorios: desde ese momento ya iban a nacer niños varones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario