La boca del lobo (1988)

Ninguna nominacion al Oscar.

Para muchos es la mejor película peruana de todos los tiempos y una de las mejores con respecto a Latinoamérica. Pancho Lombardi con gran pulso narra la historia de unos suboficiales de la Policía Nacional del Perú que con afán de ascender y llegar a ser oficiales deciden combatir el terrorismo de manera voluntaria sin saber los peligros y las consecuencias de esta difícil decisión. 

Lo mejor de todo es que esta película no está ni a favor ni de los terroristas ni tampoco de los policías; todo lo contrario, es una excelente representación del peor lado del ser humano. Nadie es inocente en cuestiones bélicas o subversivas, ni los terroristas que con el ideal de cambiar todo sacrifican la vida de los inocentes, ni tampoco los policías o militares que también se aprovecharon de la situación, especialmente en el Perú, y robaron, torturaron y hasta violaron a civiles inocentes. 

Es increíble que con tan bajo presupuesto se haya logrado hacer una genialidad. El elenco fue el mayor responsable de aquel éxito, especialmente Gustavo Bueno (Teniente Roca) y Toño Vega (Vitin). Realmente una cátedra de lo que es cine para todas las películas peruanas paupérrimas que salieron a la luz en este nuevo milenio, salvo excepciones contadas con los dedos de la mano.