jueves, 10 de marzo de 2016

Mary Poppins (1964)

13 nominaciones.
5 Oscars: Mejor actriz (Julie Andrews), Mejor montaje, Mejor banda sonora, Mejor canción y Mejores efectos visuales.

Mary Poppins es de lejos la mejor película infantil de todos los tiempos y un clásico del cine familiar. Irreconocible Walt Disney, es increíble qué tamaña obra maestra produció. Lástima que ahora sus productos son bodrios enlatados de una adaptación de algún cuento, pero cada vez más desatinado.

Realmente no parece que fuera de los años 60 y no lo digo por el color, sino por la calidad de los efectos visuales, precisos para envolverte en un mundo de ensueño. Es cierto que quizá los 140 minutos que dura la película es algo excesivo, pero todo es permitido con tal de ver el rostro de la protagonista y escuchar las canciones, aunque un poco tontas, muy entretenidas.

Y ya que hablamos de la protagonista, es imposible no mencionar su belleza. Julie Andrews es uno de los rostros más perfectos que he visto en mi puta vida y particularmente el mejor rostro británico, sorry Kelly Reilly, pero antes que nacieras existía alguien con una belleza superior. Un punto y aparte el resto del reparto, merecidísima mención a tremendos actores como Dick Van Dyke (Bert), Karen Dotrice (Jane Banks), Matthew Garberr (Michael Banks), David Tomlinson (Mr. Banks) y Glynis Johns (Mrs. Banks).

Dos niños malcriados provenientes de una familia burguesa británica hacen la vida imposible a las niñeras que pisan la casa, haciendo que su estadía sea muy corta. Inesperadamente llega una bella muchacha a la casa y convence al padre de la familia que ella es la niñera indicada. Rápidamente roba el respeto y cariño de los niños, gracias a una extraña magia. Desde ese momento no existirá nada imposible.

No hay comentarios:

Publicar un comentario