Ninguna nominación al Oscar.
George Miller nos demuestra otra vez que la clave de una película inolvidable, que trate acerca de persecuciones automovilísticas, no son los personajes musculosos, vehículos de lujo y mujeres con cuerpos de película porno. En verdad la clave del australiano es acción pura, mucha agresividad y muertes por doquier. Es una de las pocas secuelas que están al mismo nivel o quizá mejor que la original. Particularmente opino que está al mismo nivel, cada uno tiene lo suyo, lo interesante fue que el director supo reinventarse y hacer algo diferente y más arriesgado con la misma clave.
Mel Gibson como siempre impecable interpretando a Mad Max, mientras que Bruce Spence (The Gyro Captain) fue el mejor aliado y de papel fundamental en la victoria de Max. Los demás actores también estuvieron a la altura, especialmente Emil Minty (The Feral Kid). Warrior Woman (Virginia Hey) no merecía morir, pensé que se iba a quedar con Max, pero él es un guerrero solitario sin ningún rumbo ni destino.
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