No entiendo cómo un bodrio como este puede tener dos secuelas. La idea principal de Futuro Distópico donde una vez al año se puede cometer todos los crímenes siempre y cuando sea dentro de las 12 horas concedidas por el gobierno es buena, eso es innegable, pero fue mal llevada al cine, gracias a un producto burdo y con personajes caricaturescos. El elenco es pésimo, teniendo como protagonistas a Ethan Hawke y Lena Headey en el peor papel de sus respectivas carreras. Todo es previsible desde la aparición de algunos personajes y alguna escena clave del comienzo. En vez de hacer una película de slashers en contra de una familia ejemplar, hubieran dado un enfoque con un tono satírico de la naturaleza y comportamiento humano frente al descontrol.
Ahora si nos ponemos a analizar aquella descabellada idea del Gobierno para reducir la delincuencia y la pobreza resulta hasta risible. ¿Hacer que la clase media y alta salgan a las calles, exponiendo sus vidas, matando vagabundos y criminales? ¿Es en serio? Nadie en su sano juicio haría tremenda locura, es más, se supone que están dando cabida a los criminales para matar a quien sea y por otro lado a gente común poder vengarse de aquellos que odian. Así que solo la idea de Crimen legal por doce horas un día al año establecido por el gobierno hubiera sido loca pero entendible; en cambio, aducir que es para una causa ya comentada anteriormente, es estúpido, realmente absurdo.
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