Cuenta la leyenda que Lars von Trier antes de hacer su famosa trilogia de la depresión, dirigia obras maestras con un final brutal. Sinceramente es la película musical mejor realizada que he visto en mi puta vida. Björk se lució de principio a fin y protagonizó a una ciega que tenía el mayor pecado que no tener malicia alguna.
Hablaría de los actores secundarios, pero la película fue Bjork en 140 minutos con sus canciones en medio del surrealismo creado por su imaginación, no importaba otra persona, nadie brillaba más que ella, a pesar de estar envuelta en las situaciones más miserables.
Hablaría de los actores secundarios, pero la película fue Bjork en 140 minutos con sus canciones en medio del surrealismo creado por su imaginación, no importaba otra persona, nadie brillaba más que ella, a pesar de estar envuelta en las situaciones más miserables.
El director danes hizo de una película con el mismo tema sufrido y explotado hasta el cansancio, en algo insuperable. Grande Lars, siempre revolucionando el cine.
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