4 nominaciones
3 Oscars: Mejores efectos de sonido, Mejor vestuario y Mejor maquillaje.
Película de culto. De lejos el mejor film acerca de vampiros. Nos muestra la historia del Conde Dracula, un ser lleno de maldad, que al princio fue un hidalgo caballero que luchaba para el ejercito de los cristianos pero al ver que el destino se llevó a su amada Elizabetta, decidió renunciar a Dios y convertirse en el ser más repugnante. La historia comienza a volverse lenta al pasar los minutos, mató el tremendo comienzo que tuvo. En el cuerpo de la película, es destacable cuando Dracula conoce a la reencarnación de su amada, casi 4 siglos después, una delicia, poesía pura en un medio audiovisual.
Por otro lado, la banda sonora es alucinante y macabra a la vez; tanto así que casi veinte años después, American horror Story, la mejor serie de terror del nuevo milenio, utilizó aquella musiquilla en uno de sus capítulos. Las actuaciones estuvieron medio-flojos. Y en cuanto al argumento, según personas que leyeron el libro, no respetaron la trama original; aunque debo confesar que no fue un fiasco, hasta prometió mucho al comienzo, pero las dos horas le quedó eterna.
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